En este día de las fiestas en honor de la Virgen Blanca, ya es tradicional la celebración del día dedicado a los Celedones de Oro. A primera hora de la mañana visita al cementerio en memoria de los Celedones de Oro fallecidos, y este año recordando de forma especial a Cayo Luis Vea Murguía, que nos ha dejado recientemente. A las 11,30 se ha celebrado la Eucaristía en la Capilla de la Virgen Blanca.
Los Celedones de Oro han estado acompañados de Blanka Gómez de Segura, ceramista y directora del Museo de Alfarería Vasca de Ollerías que en este año ha sido galardonada con la distinción Celedón de Oro 2016. El otro galardonado Manu García, capitán del Deportivo Alavés, ha disculpado su ausencia por motivos laborales.
La Misa ha sido oficiada por D. Carlos Ortiz de Zárate, párroco de La Esperanza, que este año ha sido el predicador de la Novena en honor de la Virgen Blanca. En esta ocasión su homilía ha recalcado el sentido catequético y la importancia de los objetos que surgen de las manos de los ceramistas, que del humilde barro con maestría, paciencia y sentido de la estética logran construir los más bellos y útiles objetos. Objetos, algunos de ellos, de un gran valor desde el punto de vista de la vida cotidiana ya que en tiempos pasados eran básicos para la conservación de los alimentos. En definitiva objetos que en su interior esconden “vida” “como el útero de la mujer que cobija la nueva vida”.
En el momento de las preces, se ha producido un bello gesto, en una gran tinaja, salida de las manos de Blanka, diversos asistentes ha ido depositando flores, y en cada ofrenda, una petición: curación de enfermos, paz de los pueblos, vocaciones religiosas, rogando por los Celedones de oro, y la más joven Maialen Argote, en el momento de depositar su flor, ha rogado “por el derecho universal a la educación”.
Concluida la Eucaristía, el presidente de la Asociación Celedones de Oro José María Vélez de Mendizábal, ha impuesto el pañuelo rojo a Blanka, quien se ha dirigido a los asistentes al acto.
En sus palabras un mensaje de aliento a todas las mujeres por su capacidad sin límites para realizar trabajos que en tiempos pasados sólo han estado reservados a los hombres, como le ocurrió a ella cuando en 1978 decidió poner toda su pasión en el mundo de la cerámica y llegar a los más recónditos secretos que encierra la sencilla materia del barro. Hoy Blanka Gómez de Segura, además de ser maestra en este arte, participa en investigaciones con la UPV, dirige con gran sentido artístico, sensibilidad y tesón el Museo de Alfarería de Ollerías y participa en todo lo que rodea al mundo de la cerámica que según declaraba en un periódico local “se trata de recuperar una sabiduría que tiene miles de años” . Así mismo ha tenido un recuerdo para Manu García al que no le ha sido posible asistir al acto.
La Cofradía de la Virgen Blanca felicita a los nuevos Celedones de Oro: Blanka Gómez de Segura y Manu García, y desea a la Institución que mantenga viva la llama de estos premios que iniciaron su andadura hace cincuenta y cinco años.
© Textos: M. Camino Urdiain
© Fotos: M. C. y Mak. Urdiain y Blanca Aguillo