Cercanas las fechas de honrar a la Patrona de Vitoria-Gasteiz, la Virgen Blanca, la Cofradía se acerca a las instituciones con doble objetivo, entregar la Revista Hornacina, edición 2020 y comunicar cómo se plantean los actos previstos. Sin lugar a dudas este año en cada visita deseamos manifestar que nos hallamos más unidos que nunca con todas las instituciones para transmitir deseos de vivir estos momentos con responsabilidad.
A las 9 de mañana hemos sido recibidos por el Diputado General, Ramiro González, en la sala del Consejo del Gobierno Foral. En primer lugar se le ha hecho entrega de la revista, de la que hemos recibido una sincera felicitación, por su contenido y calidad. A continuación el Abad ha comunicado cuáles van a ser esos actos preparados para ser celebrados todos ellos en el interior de la parroquia de San Miguel, Santuario de la Virgen Blanca. En esta visita distendida no ha faltado la enorme preocupación del Diputado General por la situación que vive Álava y toda la sociedad, pero no sólo desde el punto de vista sanitario sino también el drama social y económico que estamos viviendo. Es un momento difícil para el sector industrial que no sólo afecta a las grandes empresas sino las colaterales y pequeñas industrias que viven como satélites de ellas en el conjunto de la producción.
Coincide la Cofradía con el sentir del Diputado General que ha manifestado que es “una ocasión única para lograr la cohesión social”, “todos dependemos de todos”, si te cuidas, cuidas a los demás, si te cuidas antes saldremos de esta situación de crisis humana y económica. Así se pronuncia la Cofradía, de la cohesión surge la fortaleza y con todas las garantías sanitarias estaremos juntos estos días.
Una hora más tarde sobre las 10:30, nos ha recibido en la sede de las Juntas Generales su presidente, Pedro Elosegi. También se le ha entregado la revista de la que ha refrendado su interés destacando la calidad de contenidos y autores. En esta ocasión Elosegi, que otros años vive de lleno las fiestas, esencialmente participando en la parte musical y siendo habitual su presencia en actos tan entrañables como los auroros, y eventos de toda índole, manifestaba también su enorme tristeza por los momentos que se están viviendo. Insistía en realizar una llamada continua a la sensatez, responsabilidad para que la situación vayan mejorando y de la que es buena muestra la anulación de los actos multitudinarios.
No obstante, a pesar de la situación de crisis, el Presidente de las Juntas Generales ve una parte positiva y es un momento de cambio del modo de vivir las fiestas. Nos señalaba Pedro que, desde hacía años, la “fiesta estaba derivando su forma de vivirla, buena parte de ella, en horarios no propios de las fiestas”, en clara referencia a ser los actos nocturnos los más multitudinarios. La tradición nos ha enseñado que la fiesta, la tradicional de los sencillos pueblos y lugares, que honran a patronos/as o celebran otras efemérides, las organizaban sus gentes viviendo y participando en actos y eventos en su mayoría”diurnos”. Así en el día había tiempo para todo, para encuentros religiosos, para la música, para actos tradicionales y de carácter etnográfico, para la convivencia durante los almuerzos de grupos de gentes en las calles, las comidas con amigos y en familia. Así a la luz del día ha habido siempre momentos para el encuentro y la convivencia, pero de todos, mayores y jóvenes. Ahora es el momento oportuno, de retomar otra forma de vivirlas, debido a la pandemia todos debemos manifestar claro compromiso de disfrutarlas siempre con el pensamiento puesto en los demás. En definitiva que ahora nos toca vivirlas más en la intimidad y con la prudencia y sensatez debida, teniendo presente esos otros actos tradicionales y de centenaria historia en la ciudad.
Nos ha despedido animando a seguir en la “brecha”, trabajando por y para el patrimonio material e inmaterial del que somos depositarios.
©Textos: Camino Urdiain. Cofradía de la Virgen Blanca
©Imágenes. Protocolo JJGG de Álava y Gabinete de Comunicación DFA